Hay que prever situación de peruanos frente al calentamiento

La tierra está caliente y parece que nadie quiere enfriarala. El cambio climático es irreversible y afecta los ecosistemas y formas de vida del planeta. Los científicos no dejan de gritarnos al oído que los países en desarrollo, como el perú, soportarán mayores impactos en la región amazónica y en sus sistemas de alta montaña. Pese a ello, muy poco o nada es lo que se hace para enfrentar y atenuar el problema.No obstante algunos esfuerzos regionales en Piura y la cuenca del Mantaro, o el proyecto Proclim, impulsado por varias institucionescomo el Conam, Senamhi, entre otros, las estrategias de adaptación y adecuación futura frente al cambio ciimático resultarán insuficientes ante la magnitud de los efectos negativos que se avecinan.Y esa es,por ejemplo, la advertencia de un comunicado público suscrito hace días por personalidades del mundo intelectual, académico y científico, quienes señalan que a pesar de la masiva difusión que recibe el problema del calentamiento global, "es notorio que la sociedad peruana en general y quienes conformansu clase política, en particular, siguen asistiendo pasivamente a los acotecimientos como simples espectadores, si tomar ninguna iniciativa que apunte a velar por sus propios intereses". Expresan que ellos se manifiestan en la vulneravilidad de países como el Perú frente al fenómenos "que exigen una respuesta colectiva, al lado de un liderazgo político capaz de encauzar dicha respuesta".Los firmantes, entre los que figuran Antonio brack, Rolando Ames, Fernando Fuenzalida, Benjamín Marticorena, Javier Piqué, Álvaro Roca Rey Miró Quesada, Ruth Shady ,Raúl Vargas, Fernando Tuesta, Julio Kuroiwa, demandan incluir en la agenda del actual gobierno la adopción de medidas de corto, mediano y largo plazo que sirvan para mitigar los efectos del cambio climático."Se debe prever en qué situación estaremos los peruanos en el futuro próximo, cuando dicho cambio empiece a manifestarse intensamente,"recomiendan.El país cuenta con una ley General del Ambiente, sin embargo, muchas de sus disposiciones aún no cuentan con los reglamentos pertinentes.