miércoles, enero 30, 2008

Protocolo de Kioto




El 11 de diciembre de 1997 los países industrializados se comprometieron, en la ciudad de Kioto, a ejecutar un conjunto de medidas para reducir los gases de efecto invernadero. Los gobiernos signatarios pactaron reducir en un 5% de media las emisiones contaminantes entre 2008 y 2012, tomando como referencia los niveles de 1990. El acuerdo entró en vigor el 16 de febrero de 2005, después de la ratificación por parte de Rusia el 18 de noviembre de 2004.

El objetivo principal es disminuir el cambio climático de origen antropogénico cuya base es el efecto invernadero. Según las cifras de la ONU, se prevé que la temperatura media de la superficie del planeta aumente entre 1,4 y 5,8 °C de aquí a 2100, a pesar que los inviernos son más fríos y violentos. Esto se conoce como Calentamiento global. «Estos cambios repercutirán gravemente en el ecosistema y en nuestras economías», señala la Comisión Europea sobre Kioto.

La tendencia es que hoy los estándares ambientales se definen a nivel internacional, vinculándose a los incentivos económicos. Perú es suscriptor del tratado al igual que otros 174 países.

Las naciones en vias de desarrollo demandan a los países indus­triales y viceversa mayores compromisos en la protección de los recursos naturales y en general de todo el planeta. El asunto parece complica­do. Solo en la última reunión de delegados en la cumbre sobre cambio climático de Naciones Unidas que se celebrara en la isla Indonesia de Bali se pudo llegar a un acuerdo tras difíciles y agónicas negociaciones que se prolongaron 24 horas más de lo previsto. La "hoja de ruta" de Bali prevé el inicio de un proceso de negociaciones que se exten­derá hasta 2009 y que debe fi­jar una nueva serie de objetivos para la reducción de las emi­siones que reemplace al Pro­tocolo de Kyoto, que empieza. a jugar sus descuentos.

La reallidad es que existe una avanzada tendencia a mejorar los estándares mundiales de cuidado medioambiental. Si en Perú, se instala el Ministerio del Medio Ambien­te, la busqueda de estándares ambientalemente amigables será una de sus prioridades.

En Estados Unidos, que ha­ce 10 años se resistió a firmar el Protocolo de Kioto, el pe­riodista de Bloomberg Gene Sperling señaló que ahora hay algunos indicios favorables de un cambio de mentalidad.

Un número creciente de evangélicos demanda una res­puesta al calentamiento mun­dial y llama al "cuidado de la Creación".Pero ¿ha desaparecido la clase en los escépticos? Jonathan Chait, de la revista New Republic, apunta que en una encuesta reciente de National Journal, 84 % de los republicanos de la Cámara de Representantes y el Senado a quienes se consultó no creían que se haya "probado más allá de una duda razonable que la Tierra se esté calentando por problemas creados por el hombre".

Este resultado más bien asombroso de la encuesta lleva a uno a preguntarse si estos es­cépticos siquiera tienen conoci­miento de la Cuarta Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Calenta­miento Mundial, entidad de las Naciones Unidas laureada con el premio Nobel. En ese informe, los más de 2,000 científicos del grupo concluyeron que hay más de un 90% de probabilidad de que la actividad humana fue la causa principal del calentamiento mundial.

-Según las cifras de la ONU, se prevé que la temperatura media de la superficie del planeta aumente entre 1.4 y 5.8°C de aquí al 2100.Un estudio en EE.UU. re­vela que cada grado de calentamiento dará lugar a unas 21 mil muertes en todo el mundo.

-Anualmente 3 millones de personas mueren de enfer­medades causadas por ai­re contaminado. Esto es el 5% de todas las muertes del mundo por año. Más de un millón de niños menores de cinco años que viven en Lima sufren afecciones respiratorias.